Lavamos la batidora sin desmontarla, de forma rápida y con un clic.
¡Una licuadora es un asistente ideal, un salvavidas que se puede lavar sin desmontarla!
Normalmente, limpiar este milagro es una prueba completa de destreza manual. Después de todo, realmente no querrás cortarte los dedos o los labios con cuchillos afilados.
Limpiar tu licuadora sin hacerte daño
He leído repetidamente historias en Internet sobre cómo se puede lograr la limpieza sin desmontar el instrumento ni usar las manos. Tampoco se necesita lavavajillas.
Después de escuchar un método similar de boca de un colega en el trabajo, ¡decidí que tenía que probarlo!
Entonces, lo que tenemos: un recipiente sucio y un cuchillo.
Según las historias, debes actuar de la siguiente manera:
- Se vierte agua (fría o temperatura ambiente) en el recipiente, lo ideal es que “cubra” toda la superficie sucia.
- Caen unas gotas de detergente. La batidora se sumerge en agua.
- ¡Pulsamos el botón "iniciar" y observamos cómo la herramienta se limpia sola! Suena fácil, sólo tenemos que comprobarlo en la práctica.
Usando un nuevo método
Preparé una tarta y batí los huevos con harina según la receta. Fue entonces cuando decidí lavarme la suciedad de forma diferente a lo habitual.
"Modifiqué" un poco el método: utilicé agua casi caliente.
Dejé caer un poco de detergente (una pequeña cantidad, menos de una cucharadita).
Bajé las cuchillas para que tocaran el fondo. Cubrí prudentemente la parte superior con la mano para evitar salpicaduras (¡por si acaso!).
Bueno, impresionante, pero no lo suficientemente limpio. Repitió el procedimiento con agua caliente y jabón.
Y después de 2 veces - con una limpia para eliminar los posibles restos de producto en las paredes.
Debo decir que ¡el método funcionó muy bien! Los cuchillos están limpios, no queda suciedad por ningún lado.
¿Qué pasa con el batidor?
Bueno, el método funcionó con un cuchillo, pero ¿qué pasa con el batidor?
Decidí repetir todo exactamente: batí los huevos con harina, agregué agua caliente y detergente al recipiente. También bajé el instrumento al agua.
Repetí el procedimiento con la solución jabonosa dos veces. Luego se “enjuaga” con agua limpia.
¡El resultado es obvio!
Pros y contras de los métodos, algunos consejos.
Después de probar este método simple pero bastante efectivo, saqué algunas conclusiones.
Para empezar, el lado positivo:
- Velocidad. ¡Realmente ahorra tiempo! Especialmente si activa la velocidad máxima al limpiar.
- Sin peligro. No hay absolutamente ningún riesgo de lastimarse la piel de las manos, arrancarse una uña, etc.
- Versátil. Si desea minimizar el uso de detergentes, en lugar de una solución jabonosa, puede utilizar de forma segura una solución de refresco.
Desventajas:
- Es posible que no pueda soportar alimentos secos o manchas más "pesadas".
- En algunos casos, son necesarias múltiples repeticiones.
- En lugares de difícil acceso puede quedar suciedad. Pero esto no es fatal: puedes quitarlo con cuidado con un palillo o una servilleta.
Algunas conclusiones que he sacado o consejos para el futuro:
- Siempre enjuague la licuadora varias veces con agua limpia y verifique con las manos si hay grasa o detergente.
- Si se trata de masa seca, por ejemplo, es mejor verter primero agua tibia en un recipiente, colocar la herramienta y dejar reposar. Será mucho más fácil.
- Si fue con claras de huevo batidas que se secaron en las cuchillas, es mejor no experimentar.Es más difícil lavar esta película y una capa seca puede afectar negativamente el funcionamiento del instrumento.
- ¡Ten cuidado! Dado que el proceso utiliza mucha agua y una máquina alimentada por electricidad, siempre existe el riesgo de que se produzcan gotas. Aunque los electrodomésticos modernos están diseñados para minimizar estos riesgos, es mejor ir a lo seguro y cubrir la parte superior del vaso con la mano o verter menos agua.
En pocas palabras: el método es excelente y funciona. ¡Disfrútalo por tu salud!